La subida de precios en la alimentación, los tipos de interés y los gastos generados con motivo del inicio del curso escolar han tenido un fuerte impacto sobre la economía de las familias numerosas, que sufren especialmente la cuesta de septiembre. Así lo constata el Estudio sobre las familias Numerosas en España, realizado por la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN), con el apoyo del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 20230, con encuestas a más de 9.000 familias numerosas de distintos puntos de España, según el cual sólo un 22% de estos hogares vive sin dificultades económicas.
El resto, un 78%, es decir, 8 de cada 10 familias numerosas, asegura tener dificultades para cubrir todos los gastos importantes, y se ve obligado a “hacer muchos números” (26%); recortar gastos de capítulos secundarios (25%), y tirar de ahorros o pedir un préstamo, como hacen 1 de cada 5 familias, el 20%, porcentaje que el año pasado era del 12%.
El estudio, realizado con el apoyo técnico de la empresa demoscópica GAD3, pone de manifiesto que septiembre es un mes complicado para las familias, en especial por la vuelta al cole, un extra al que los hogares con más hijos se enfrentan quitando gastos de otros capítulos, según afirma el 48% de las familias, o de ahorros (44%). El impacto económico del inicio del curso afecta a una inmensa mayoría de familias: solo un 16% de familias asegura asumir sin dificultades todo lo que implica volver al colegio.
Marcas blancas, ofertas y menos frescos
Además, a los gastos de la vuelta al cole se ha unido este año la subida de la hipoteca, que ha afectado a 1 de cada 2 familias numerosas, y el alza de todos los precios, en especial, los que se refieren a la cesta de la compra, cuyo efecto ha obligado a la inmensa mayoría de familias a cambiar sus hábitos de compra (96%), según el estudio. Sobre esto, un 65% de familias afirma que ahora compara más los precios y opta por marcas blancas; un 60% busca y compra lo que está de oferta en el supermercado y un 30%, casi 1 de cada 3 familias, ha reducido la compra de productos frescos como la carne, el pescado, la fruta.
La cuestión económica es un quebradero de cabeza para una mayoría de familias numerosas; de hecho, la mitad de ellas (48%) asegura haber buscado varias “opciones para aumentar los ingresos”, aunque no han podido y no han tenido más remedio que ajustar aún más los gastos. De la misma forma, un 18% de ellas ha optado por el pluriempleo para tener más ingresos y un 13% ha pensado en cambiar de trabajo.
“Las familias se han visto ahogadas porque son familias que viven muy al día y ahora han tenido que afrontar el extra de la vuelta al cole en un momento de gran subida de precios, incluidas hipotecas”, explica el presidente de la FEFN, José Manuel Trigo, quien destaca que “estas familias cuentan en su gran mayoría con dos sueldos, pero que resultan insuficientes para poder cubrir todos los gastos que se generan en una casa en la que viven 5 o 6 personas”, explica; “y hablamos de gastos básicos, como alimentación, educación y los suministros imprescindibles del hogar, como es la electricidad, agua, etc. -continúa el presidente de la FEFN-; de hecho, las familias se aprietan el cinturón, y para afrontar la vuelta al cole, por ejemplo, como indica la encuesta, han optado sobre todo por recortar de capítulos secundarios como las extraescolares o el ocio o las vacaciones”, concluye.
Cómo son las familias numerosas
La familia numerosa más frecuente sigue siendo la de 3 hijos, aunque con respecto al estudio anterior, en la muestra de la encuesta, de 9.400 familias, se ha incrementado el número de familias de 4 y 5 hijos, que representan el 20% y el 10%, respectivamente. Las familias más grandes son minoría, las de 6 ó más hijos suponen el 6% del total de familias numerosas.
Los hijos siguen estando en la mayoría de los casos en edad escolar, ya que la media del mayor es de 14,5 años, el segundo tiene 12 años y el tercero y cuarto en torno a 10 años. Un 93% de familias están formadas por una pareja casada y un 3%, separada o divorciada. Un 5% de familias numerosas son reconstituidas, es decir, que aportan hijos de relaciones anteriores, y un 5%, monoparentales. El resto de situaciones, como viudos y parejas de hecho, etc. son minoritarias en la muestra.
La discapacidad está muy presente en las familias numerosas, en concreto en un 13% de estos hogares: en el 72% de los casos por un hijo, en un 18% por uno de los padres y en un 9% por padres e hijos.
Los padres y madres de familia numerosa tienen mayoritariamente formación universitaria, un 80% en el caso de los padres y un 86% en el de las madres y en la mayoría de las familias numerosas trabaja el padre y la madre. En el caso de los hombres, el 59% trabaja en el sector privado y un 15% en el sector público, mientras que un 19% es autónomo o tiene una empresa o negocio. En el caso de las madres, trabajan para la Administración en el 51% de los casos, para el sector privado en el 19% y un 11% trabaja por cuenta propia.
La muestra recogida pertenece a familias numerosas que mayoritariamente no están asociadas a una asociación de familias numerosas (58%). En lógica relación con ello, un tercio de los encuestados asegura no conocer el trabajo de estas entidades, si bien otro porcentaje importante de familias, el 62%, reconoce la “labor fundamental” que estas entidades realizan porque “presionan a las administraciones y nos informan y asesoran en todo”.
El 80% de las familias numerosas considera «un problema» la conciliación de la vida laboral y familia.
La conciliación de la vida laboral y familiar es «un problema» para el 80% de las familias numerosas, es decir, 8 de cada 10, y este porcentaje sube hasta el 87% en el caso de las familias con padres más jóvenes y presumiblemente hijos más pequeños, según datos del Estudio sobre las Familias Numerosas en España, elaborado por la FEFN con encuestas a más de 9.000 familias de distintas partes de España.
Las dificultades para poder compaginar los horarios laborales con las necesidades de los niños se dan a diario, pero afectan sobre todo en vacaciones escolares y días no lectivos, en los que la mayoría de las familias tiene que hacer un desembolso económico para que sus hijos estén atendidos mientras ellos trabajan. Según la encuesta, un 51% se ven obligadas a pagar para que los niños puedan ir a campamentos de verano, mientras que un 35% asegura haber necesitado la ayuda de abuelos o familiares para el cuidado de los niños y otro 32% ha contado con personal remunerado en casa.
Recuperar la bonificación por contratar cuidadores
Sobre esto último, y en relación con los gastos que la conciliación ocasiona cuando los niños no tienen colegio, las familias (68%) piden sobre todo que se recupere la bonificación del 45% en las cuotas a la Seguridad Social por contratar cuidadores, recientemente eliminada, y una mayor flexibilidad en el trabajo para poder conciliar, con jornadas intensiva y teletrabajo para todos los empleados con hijos menores de 12 años (52% de las familias), y bonificaciones en los campamentos urbanos públicos (49%), que, aun siendo más económicos, tienen un coste importante para familias con 3 o más hijos.
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